Diarios de Vampiros es una
serie estadounidense de drama perteneciente a la cadena The CW, basada en la
novela The Vampire Diaries de L. J. Smith. La segunda temporada se estrenó el 9
de septiembre de 2010, tiene 22 capítulos con una duración de 43 minutos cada
uno.
Sinopsis
Katerina Petrova regresa a
Mystic Falls para recuperar la piedra lunar, piedra que será parte de un ritual
para liberar a los vampiros o hombres lobos de la maldición que los aqueja.
Como parte del ritual, es necesaria la sangre de un vampiro, la sangre de un
hombre lobo y la sangre del doppelgänger; Elena Gilbert, lo cual los hermanos
Salvatore no permitirán.
En la serie se
maneja la existencia de los hombres lobo como un mito que resulta ser real y se
enteran que no están muy lejos de ellos, está en la familia Lockwood. La
maldición se activa al asesinar a una persona y consiste en que, cada luna
llena se transforma en lobo. La transformación es dolorosa porque todos los
huesos de su cuerpo se rompen y no tienen control de sus actos.
Tal como los
hombres lobo, los vampiros también tienen una maldición. Ellos no pueden
caminar bajo la luz del día. En la serie nos explican que hace mucho tiempo una
bruja hizo un hechizo sobre los hombres lobos y los vampiros condenándolos a
esa maldición. La maldición se puede romper haciendo un ritual para el cual se
necesita la piedra lunar, sangre de hombre lobo, sangre de vampiro y la sangre
del doppelgänger, que en este momento es Elena Gilbert.
Para este punto
yo me preguntaba: ¿Qué tiene que ver el doppelgänger Petrova con la maldición?
Y creo que acá hay una incongruencia porque la familia Petrova no era de
América y el ritual se llevó acabo en Estados Unidos tiempo atrás. Las
descendientes Petrova son importantes porque fueron el sacrificio para el
ritual y ellas son la clave para eliminar la maldición.
Los Originales
son los primeros vampiros, los más viejos y poderosos. Son inmortales y siempre
consiguen lo que quieren y lo que quieren es romper la maldición.
Los detalles
Durante la temporada vemos que la magia es muy importante en la serie, pero a mediados de la temporada me pregunté por qué no le dan la importancia que le corresponde… después lo entendí. Estamos acostumbrados a ver que la magia es fantasía, me refiero a que la muestran de una forma muy soñada, con brillantina, efectos especiales, objetos volando y colores, pero Diarios de Vampiros nos presenta una magia más real, velas, cánticos, pequeños resultados visuales de los rituales realizados, algo que no está mal.
En esta segunda
temporada la serie logra mantener el misterio que tuvo en la primera temporada
e incluso superándolo con una trama enredada y bien construida, dándonos información
del pasado y del presente, un juego que hace que la serie sea ligera, aun
siendo 22 capítulos. Los personajes evolucionan, no son los mismos que eran en
la primera temporada, tanto que llegamos a tener empatía con Katerin pese a
demostrar que solo piensa en ella. Las relaciones se construyen de una manera
muy orgánica y también es muy creíble las relaciones del pasado, como la de
Damon con Katerin. Él la amaba y ahora ama a Elena, es un juego que la serie
mantiene, cierto romance implícito entre Damon y Elena, por parte de Damon.
Damon es un personaje que sufre por amor, sufrió por Katerina y ahora sufre por
Elena porque ellas prefieren a Stefan.
Dos cosas a las
cuales les pudieron invertir un poco más de creatividad y de presupuesto son:
1. La forma en la que corren los vampiros y 2. Las escenas dobles de Nina
Dobrev (Elena y Katerin). Aunque hay que resaltar que los personajes
interpretados por Dobrev son muy buenos, odias a Katerin y amas a Elena.
Visualmente y psicológicamente Elena y Katerina son muy diferentes, se nota una
buena construcción de los personajes por parte de la actriz.
La serie en esta
temporada nos da romance, drama, suspenso y giros en la trama muy interesantes,
en definitiva, va hacia un muy buen camino.
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