The Queen's Gambit, una obra maestra de Netflix

Bookfliks (2020)

The Queen’s Gambit o Gambito de dama para Latinoamérica es una miniserie basada en la novela del mismo nombre. Cuenta con 7 capítulos con una duración de 46-65 minutos cada uno. Se estrenó en Netflix el 23 de octubre de 2020.

 

Sinopsis:

Beth, luego de un accidente en el que perdió a su madre, llega a un orfanato. En este orfanato conoce a quien será su primer mentor en el ajedrez y quien descubrirá el gran talento que ella posee. Talento que la lleva a ser una de las mejores jugadoras de ajedrez y a conquistar un territorio de hombres.

 

Gambito de Dama es una serie que se disfruta de principio a fin.

Uno como espectador jamás se imaginaría lo emocionante que puede llegar a ser una partida de ajedrez. En todas las escenas en las que juegan se siente la tensión. Una tensión que se disfruta y emociona. Es curioso que, pese a que el espectador no sabe nada de ajedrez, como fue en mi caso, la serie mantiene la atención en esas escenas llegando a ser las mejores de la serie. En definitiva, un muy buen trabajo de dirección, actuación y musicalización.

Las actuaciones en la serie son muy realistas, se dan el tiempo para hacer las acciones, cada detalle y cada movimiento. Es realmente disfrutable.

 

Nuestra protagonista Beth Harmor es un personaje muy complejo. Vemos lo que ha pasado desde el supuesto accidente de su madre y cómo el ajedrez se convirtió en parte fundamental en su vida. Es interesante la manera en la que ahondan en el personaje sin ser discursivos. Vemos en cada acción que comete de adulta las carencias emocionales que lleva arrastrando toda su vida. Y nos muestran la evolución de su adicción a los tranquilizantes y al alcoholismo.

Algo que cabe resaltar de la serie es que da lo justo y necesario. No tenemos capítulos aburridos sin contenido importante para el desarrollo de la historia ni tenemos situaciones apresuradas. Todo el tiempo fue manejado de una buena manera.

 

#FanTime #SpoilerAlert

Aparte de la tensión que se maneja en los juegos de ajedrez, otra tensión, al menos para mí, fue la adicción de Beth. No sé porque, de pronto por lo que le dijeron durante una entrevista que iba algo así: “La genialidad y la locura van de la mano”. Todo el tiempo estuve pensando que Beth iba a terminar mal, intoxicada o alcohólica y de hecho estuvo a punto de terminar así. Ella solo estaba sobria cuando estaba acompañada de amigos. Y siempre involucraba el sexo en sus relaciones interpersonales, lo que sigue dejando ver sus problemas emocionales. Lo bueno de todo esto es que, al menos en donde terminó la serie, Beth salió triunfadora y sin necesitar de las pastillas ni del alcohol.

 

La estética

Más allá de la ambientación de la serie, cabe decir que fue muy buena, destacaba mucho el trabajo invertido en la imagen de Beth. En cada momento luce espectacular con trajes coloridos y estilos de la época. Resaltando su feminidad en medio de un juego en el que solo destacaban los hombres.

Otro punto muy bien hecho son las visiones que Beth tiene sobre el tablero de ajedrez. Como las sombras se convierten en el tablero y aparecen las piezas en el techo.

 

Hace mucho que no me la pasaba muy bien viendo una serie. Esta serie tiene todo para enganchar, buena historia, buen desarrollo y personajes icónicos. El único punto débil que, aparentemente, tiene es el ajedrez, porque no es un juego que sea muy popular ni que todo el mundo quiera jugar y mucho menos ver y, sin embargo, esas escenas resultan ser las mejores de la serie e incluso llegaron al público que no conoce ni le interesa el ajedrez. Yo me incluyo. De hecho, cuando la estaba viendo lamenté no haberle prestado más atención a las clases que mi hermano intentó darme sobre ajedrez, posiblemente hubiera disfrutado también la parte técnica de los juegos.

 

Debo agradecer a mi mejor amigo la recomendación. La disfruté mucho.

¡¡¡Gracias!!!